A la llegada de los conquistadores los antiguos templos indigenas fueron demolidos y con sus piedras se levantaron las nuevas iglesias y palacios españoles, eso es lo que aprendemos en la clase de historia, otra opción era establecer pueblos nuevos alejados de los antiguos lugares sagrados. Sin embargo, hay algunos raros ejemplos en donde las construcciones indígenas permanecieron en pie durante toda la época colonial y a la fecha siguen formando parte del paisaje urbano en México o bien, fueron absorbidas por la mancha urbana. Así que aquí tienes 5 poblaciones mexicanas que aún tienen pirámides prehispánicas.
1. Castillo de Teayo (Veracruz)

En el municipio y pueblo del mismo nombre aun se encuentra en pie su templo prehispánico, conocido popularmente como “El Castillo”, con una altura de 11 metros. Si bien se ubica dentro de una zona Huasteca el templo tiene un estilo constructivo tolteca, es decir, debió haberse tratado de un pueblo tributario desde la época tolteca hasta la época mexica, más o menos desde el siglo XI al XVI, pues a la llegada de los españoles se sabe que la región estaba bajo dominio mexica. En los primeros años de la conquista era común dejar los templos en pie antes de que llegaran los evangelizadores y comenzaran la demolición de las construcciones indígenas para levantar las iglesias católicas, sin embargo, no se sabe exactamente por qué en este caso decidieron mantener en pie este templo prehispánico el cual ha sobrevivido hasta nuestros días y es el orgullo del pueblo.
2. Izamal (Yucatán)

Esta ciudad actualmente convertida en pueblo mágico fue uno de los puntos más importantes de Yucatán durante la época colonial, era conocida como “la ciudad de los cerros” por los montículos que destacaban en una tierra totalmente plana, no obstante, estos “cerros” no son formaciones naturales, sino 5 pirámides que levantaron los antiguos mayas y que aún forman parte del paisaje. Entre las cuadras que conforman el pueblo mágico actual, en algunos predios aún se levantan los antiguos templos mayas de la época clásica. Al momento de establecer el pueblo actual, las pirámides ya estaban en desuso pues llevaban casi medio milenio abandonadas en la selva.
Debido a la convencida de construcciones españolas, prehispánicas y al pueblo mestizo que se formó, Izamal es conocida como la ciudad de las tres culturas, debido a ello y al enorme atrio de su templo católico Izamal fue seleccionado por el papa Juan Pablo II para dar una misa en 1993 por su simbolismo espiritual que va más allá de las culturas.
3. El Cerrito (Querétaro).

Está pirámide es un ejemplo del avance de las civilizaciones del clásico hacia el norte de Mesoamérica, pues está en una zona de convergencia de las culturas de occidente, las del centro de México como los otomies y las del norte como los chichimecas, así que fue un centro político y religioso donde convivían esta diversidad de pueblos hacia el 450 – 800 d.c. El templo tiene casi el tamaño de la celebre pirámide de la Luna en Teotihuacan con 30 metros de altura.
Villa del Pueblito en el municipio de Corregidora, mejor conocido como “El Pueblito”se fundó en el siglo XVII y en lugar de tomar las piedras de la gran pirámide para su construcción, al pie de este antiguo templo prehispánico se colocó una imagen de la purísima concepción. En el siglo XIX, un hacendado de la región construyó su casa en la cima de la pirámide la cual fue habitada por poco tiempo y actualmente sigue en pie. Conforme fue creciendo la zona urbana de Querétaro la ciudad llegó hasta el Pueblito y ahora el antiguo templo del clásico se encuentra dentro la mancha urbana.
4. Cholula (Puebla)

Cholula tiene el titulo de ser la ciudad poblada más antigua de América, pues ha sido el hogar de miles de habitantes desde hace más de 2 mil años de manera continua hasta la actualidad, es decir, pasando por los períodos preclásico, clásico, posclásico, colonial hasta la actualidad. A lo largo de la historia antigua se fue construyendo la que es considerada la pirámide más grande del mundo en volumen, conocida como Tlachihualtepetl o “cerro hecho a mano” uno de los lugares más sagrados de México no pudo ser demolido por los conquistadores españoles y actualmente está cubierto por la maleza. En la cima construyeron un templo católico dedicado a la Virgen de los Remedios, la cual tiene una imagen de esta virgen traída por Hernán Cortés, pues este mismo sitio era el templo de Quetzalcoatl donde el celebre conquistador derribó la escultura del dios como muestra de poder. La ciudad prehispánica se mezcla con la ciudad moderna y colonial.
5. Pirámides de Villa Olimpica (CDMX)

En el pre-clásico, hace unos 2500 años surgió una de las primeras grandes ciudades del Valle de México en las faldas de la sierra del Ajusco y la rivera del antiguo lago. Sin embargo, un par de siglos antes de nuestra era hizo erupción el volcán Xitle llevando a sus pobladores a abandonar el sitio. La parte más famosa de la zona arqueológica es la pirámide circular de Cuicuilco, sin embargo, cruzando la avenida Insurgentes Sur se encuentra otra de las secciones de la antigua ciudad en medio de la moderna zona habitacional Villa Olímpica. Como su nombre lo indica, en los juegos olímpicos de México 68 se construyeron estos edificios para hospedaje de los atletas, incluso, durante el proyecto conocido como espacio escultórico para dar la bienvenida a los países visitantes se levantó una escultura monumental moderna en la cima de una de las antiguas pirámides, creando un paisaje bizarro donde se combinan instalaciones deportivas, edificios de oficinas, avenidas, esculturas y pirámides del pre-clásico.
Y tú, ¿conoces alguna otra pirámide en medio de algún pueblo o ciudad actual?